Hoy tenemos Luna Nueva en el grado 10 de Libra y al estar en conjunción a uno de los Nodos, en este caso el Nodo Sur, tenemos eclipse de Sol. En un eclipse, la Luna se interpone entre la Tierra y el Sol y no deja que llegue su luz. En este caso es eclipse anular, o sea, la Luna no tapa del todo al Sol y se deja ver un anillo brillante alrededor del borde que se conoce como anillo de fuego. A este tipo de eclipse se le conoce como eclipse anular. Este tipo de eclipse se da cuando la Luna está más alejada de la Tierra y, por lo tanto, no cubre completamente el Sol, como lo haría un eclipse total.
El eclipse se podrá ver en Chile, Argentina, Uruguay y el sur de Brasil. En otras partes como parte de Sudamérica, Océano Atlántico y extremo sur de África sólo podrán ver parte del Sol cubierto.
Este eclipse se da en Libra y en conjunción casi exacta a Mercurio, así que los temas de comunicación y comercio serán de relevancia. Al darse en la casa 6 nos toca temas del trabajo y la salud.
Libra es el signo de la armonía, las relaciones y el equilibrio. Mercurio, por su parte, rige la comunicación, el intelecto y los procesos mentales.
Al estar en la casa 6, este eclipse trae un énfasis en la salud, la rutina diaria y el ambiente laboral. Nos invita a reorganizar nuestras rutinas para hacerlas más equilibradas y funcionales. Si hemos estado descuidando aspectos de nuestra vida diaria, especialmente relacionados con hábitos de salud o la gestión del estrés, este eclipse puede servir como un punto de inflexión.
Pueden surgir revelaciones o cambios importantes en el ámbito del trabajo, ya sea en nuestras relaciones laborales o en nuestra actitud hacia el servicio y la eficiencia en nuestro día a día.
Al estar en Libra, signo regido por Venus, que se enfoca en las relaciones y la armonía, este eclipse puede poner sobre la mesa la necesidad de reevaluar nuestras relaciones laborales. Tal vez haya desequilibrios que necesiten ser corregidos, como por ejemplo, asumir demasiada carga de trabajo o no recibir suficiente reconocimiento. Es un buen momento para mejorar la cooperación y la justicia en el entorno laboral. También puede implicar que tengamos que reconsiderar las alianzas profesionales o colegas con los que trabajamos diariamente.
La casa 6 es el área de nuestra carta que rige cómo cuidamos nuestro cuerpo y nuestra mente a través de hábitos de vida saludables. Este eclipse en Libra puede sugerir la necesidad de encontrar un equilibrio entre nuestras responsabilidades y el autocuidado. Si nos hemos estado dedicando excesivamente al trabajo, este eclipse podría señalarnos que es momento de cuidar mejor nuestro bienestar físico y mental.
Mercurio en conjunción con el eclipse añade un componente clave de comunicación y análisis.
Esta conjunción puede estimularnos a replantear cómo gestionamos nuestra rutina desde un enfoque intelectual. Mercurio nos brinda una visión más clara sobre los cambios que necesitamos hacer, así como la capacidad de analizar los detalles y resolver problemas relacionados con la casa 6. Podríamos encontrar nuevas formas de trabajar más eficientemente o de mejorar nuestra relación con colegas a través de la comunicación honesta y constructiva. Mercurio es muy racional, por lo que esta energía puede ayudarnos a planificar mejor nuestras actividades diarias. Esto puede involucrar aprender a priorizar tareas, dejar de procrastinar o mejorar la manera en que nos organizamos.
El eclipse en conjunción con Mercurio también puede influir en nuestra salud mental y emocional, lo que nos lleva a revisar cómo gestionamos el estrés o la ansiedad. Es un buen momento para introducir prácticas que mejoren nuestro bienestar mental, como la meditación o simplemente dedicar más tiempo a actividades que nos relajen.
A nivel personal, este eclipse puede generar un impulso para reorganizar la vida laboral, buscando un equilibrio más justo y eficiente. Prestar atención a la salud, tanto física como mental, revisando hábitos que podrían necesitar ajustes. Mejorar la comunicación en el trabajo, asegurando que nuestras relaciones profesionales sean equilibradas y respetuosas. Optimizar nuestras rutinas diarias, encontrando maneras más eficientes y armoniosas de gestionar nuestras responsabilidades.
Este eclipse puede revelarnos qué partes de nuestra vida cotidiana están en desbalance, dándonos la oportunidad de realizar cambios positivos.
A nivel mundial podríamos ver discusiones o cambios en políticas que buscan mejorar el bienestar y el equilibrio en el entorno laboral. Podrían surgir temas relacionados con la prevención de enfermedades, el manejo del bienestar en las comunidades y la necesidad de reevaluar los sistemas de salud. Como el eclipse ocurre en Libra, los temas de equidad, justicia y relaciones diplomáticas también podrían estar en el centro de atención.
El regente de Libra, Venus se encuentra en Escorpio en la casa 7, precisamente la casa de Libra, así que esta posición nos indica que nuestras relaciones (casa 7) serán profundas (Escorpio). Buscamos conexiones que vayan más allá de lo físico y emocional, hacia lo espiritual y psicológico. Es posible que experimentemos relaciones que nos cambien de alguna manera, ya que Escorpio rige los procesos de transformación, muerte y renacimiento. Esto puede significar que las relaciones traigan consigo desafíos que nos obliguen a crecer y evolucionar. Escorpio también está relacionado con el poder, el control y la manipulación. Con Venus en Escorpio en la casa 7, puede haber una tendencia a buscar control o poder en nuestras relaciones, ya sea de manera consciente o inconsciente. Esto podría manifestarse como celos, posesividad o una necesidad de saberlo todo sobre la pareja o los socios.
Si bien esta energía puede generar una gran intensidad emocional en las relaciones, también es importante ser conscientes de los patrones de control o manipulación. Puede haber lecciones sobre confianza y la necesidad de equilibrar el poder dentro de las relaciones.
Venus en Escorpio se siente atraída por lo que es misterioso, oculto o poco convencional. Esto puede reflejarse en la búsqueda de relaciones más profundas o secretas, en las que la discreción y el misterio juegan un papel. Las relaciones pueden tener un aire de misterio o estar marcadas por secretos o aspectos ocultos. También es posible que nos veamos atraídos por personas que tengan un carácter más enigmático o intenso, que tengan una fuerte carga emocional o que nos inviten a explorar nuestro lado más oscuro o profundo.
En la casa 7, la ubicación de Venus en Escorpio sugiere que nuestras relaciones más importantes pueden ser catalizadores de transformación personal. La pareja o los socios pueden ser quienes nos desafíen a enfrentar nuestros miedos más profundos, nuestras inseguridades y las sombras emocionales que preferiríamos evitar. Las asociaciones pueden pasar por ciclos de crisis y renovación. Si bien esto puede ser difícil, también es una oportunidad para un crecimiento significativo y para crear vínculos más auténticos y profundos con los demás.
La triple conjunción del Sol, la Luna y Mercurio queda en cuadratura a Marte en Cáncer en la casa 3 es una configuración que nos habla de tensiones, desafíos y posibles conflictos en la manera en que nos comunicamos y cómo gestionamos nuestras emociones y acciones.
Marte en Cáncer a menudo actúa de manera emocional y defensiva, lo que puede generar reacciones impulsivas, especialmente cuando sentimos que nuestro entorno cercano (familia o seres queridos) está amenazado.
Casa 3 está relacionada con la comunicación, el entorno inmediato, hermanos, vecinos y el aprendizaje cotidiano. Marte en esta casa puede generar una tendencia a discusiones o conflictos verbales, tensiones con personas cercanas o luchas por expresar nuestras ideas de manera efectiva. Se darán revueltas tensas en la calle reclamando derechos laborales y de bienestar. Es posible que reaccionemos de manera más impulsiva o defensiva en las conversaciones. Podríamos sentirnos atacados fácilmente o que nuestras emociones nos desbordan, haciendo que digamos cosas sin pensarlo demasiado.
Mercurio representa la mente y Marte la acción. La cuadratura entre ambos genera una falta de sincronía entre lo que pensamos y lo que hacemos. Es probable que sintamos que no estamos siendo escuchados o que nuestras ideas no son bien recibidas, lo que nos lleva a actuar de manera más agresiva. Marte en Cáncer puede hacernos defender ferozmente nuestras emociones o creencias, incluso si no estamos completamente seguros de ellas. Puede haber una tendencia a sentirnos amenazados o a interpretar los comentarios de los demás como críticas personales, lo que genera discusiones innecesarias.
Podemos sentir que nos cuesta expresar nuestras emociones de manera clara o que, cuando lo hacemos, los demás nos malinterpretan. Esto puede generar frustración y conflictos, especialmente con personas cercanas (familia, amigos, vecinos). Marte en Cáncer suele actuar desde un lugar emocional, por lo que es probable que las discusiones tengan una carga emocional fuerte. Esto puede hacer que los malentendidos se conviertan en grandes problemas si no gestionamos nuestras reacciones de manera consciente.
Deberíamos reflexionar antes de actuar o hablar. Puede haber una tendencia a reaccionar de manera inmediata y emocional, lo que podría generar conflictos innecesarios o agravar situaciones que podrían resolverse con calma.
Se forma un gran trígono de agua entre Venus en Escorpio en la casa 7, Marte en Cáncer en la casa 3 y Saturno en Piscis en la casa 11 durante el eclipse tiene un profundo impacto emocional, relacional y estructural. Este tipo de alineación armoniosa entre planetas en signos de agua (Cáncer, Escorpio y Piscis) facilita el flujo de energías emocionales, intuitivas y creativas, con un enfoque en las relaciones, la comunicación y el apoyo mutuo en nuestras metas de vida.
Que se dé este gran trígono en la carta del eclipse sugiere que podemos aprovechar este momento para hacer un trabajo emocional profundo, liberar viejas cargas y encontrar una mayor estabilidad emocional y relacional. La energía de los planetas en signos de agua también facilita la sanación y la transformación emocional. El eclipse en combinación con Venus en Escorpio en la casa de las relaciones nos empuja a evaluar y transformar nuestras conexiones más significativas. Podemos sentir una necesidad de intensificar nuestros vínculos o de eliminar aquellas relaciones que no nos aportan crecimiento emocional. Este aspecto también invita a la sanación de viejas heridas emocionales a través de nuestras relaciones.
Marte en Cáncer en la casa 3 resalta la importancia de la comunicación emocional durante este tiempo. Podemos sentirnos más inclinados a defender nuestros puntos de vista y emociones con aquellos que nos rodean, pero de una manera más cautelosa y protectora. Este tránsito también favorece la resolución de conflictos a través de la empatía y la comprensión emocional, lo que puede ser clave durante el eclipse.
Saturno en Piscis en la casa 11 nos invita a asumir responsabilidades dentro de nuestras comunidades y grupos sociales, especialmente en términos de apoyo emocional y contribución a proyectos colectivos. En el contexto del eclipse, esto puede marcar un período de reflexión sobre cómo nuestras metas personales y sueños encajan dentro de una estructura más grande, y cómo podemos construir redes de apoyo más sólidas en nuestra vida.
El eclipse siempre trae cambios, culminaciones y nuevos comienzos. En este caso, el gran trígono de agua añade un componente emocional y transformador al evento, ayudándonos a procesar cambios internos de una manera más suave y fluida. Este eclipse está invitando a mirar hacia adentro, sanar viejas heridas y establecer bases más sólidas para nuestras relaciones personales, nuestras metas sociales y nuestro sentido de propósito en la vida.
A nivel mundial este gran trígono de agua puede influir en una mayor conciencia emocional en temas sociales y globales. Es un momento para que los colectivos y gobiernos reflexionen sobre cómo sus decisiones afectan emocionalmente a la sociedad.
Temas relacionados con el agua, los océanos, las emociones colectivas y la sanación de heridas sociales profundas pueden estar en el centro de la atención.
En conjunto, este gran trígono crea un punto de equilibrio en la carta del eclipse, brindando la posibilidad de transitar los cambios con mayor resiliencia emocional y la capacidad de crear conexiones más profundas y significativas con nosotros mismos y con los demás.
El ascendente Aries en la carta del eclipse, junto con el Nodo Norte en la casa 12, aporta una combinación de impulso hacia la acción y el desafío de lidiar con temas internos profundos.
El ascendente en Aries señala que durante este periodo hay una fuerte energía de iniciativa, acción, valentía y nuevos comienzos. Aries es el primer signo del zodíaco y simboliza el impulso de avanzar, la búsqueda de independencia y la afirmación del yo. La influencia del ascendente en Aries durante el eclipse sugiere que a nivel individual y colectivo nos sentiremos motivados a tomar decisiones rápidas, actuar de manera decidida y empezar proyectos nuevos. También puede haber una mayor urgencia por romper con viejas limitaciones y ser más auténticos y asertivos. Este tránsito nos invita a confrontar situaciones con coraje y a no tener miedo de los cambios que trae el eclipse. Sin embargo, la naturaleza impaciente de Aries también podría generar tensión, ya que existe el deseo de obtener resultados inmediatos, lo que podría generar impulsividad y errores si no se maneja con cuidado.
El Nodo Norte representa hacia dónde nos dirigimos, el camino evolutivo y las lecciones de crecimiento que debemos aprender. Al estar en la casa 12, la casa de lo oculto, el subconsciente, el karma, la espiritualidad y los finales, sugiere que el crecimiento espiritual y personal durante este eclipse está profundamente ligado a la necesidad de sanar viejas heridas emocionales y karmáticas.
La casa 12 también rige lo que está "detrás de escena", incluyendo nuestros miedos, secretos, y patrones inconscientes. Con el Nodo Norte aquí, se nos invita a mirar hacia adentro y confrontar aspectos de nuestra psique que hemos estado ignorando o reprimiendo. Es un tránsito de introspección, donde trabajar en la compasión, el perdón y el desapego de viejos patrones de comportamiento será clave.
Existe la necesidad de soltar lo que ya no nos sirve. Dado que la casa 12 rige los finales y la disolución, es posible que durante este periodo debamos dejar ir ciertos aspectos de nuestra vida que ya no están alineados con nuestro propósito evolutivo.
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